En nuestro mundo, actualmente están ocurriendo muchas cosas que distraen la atención de las mentes tanto de los jóvenes como de los más adultos. Estas distracciones están evitando que la gente concentre sus pensamientos en la verdadera imagen de Cristo que debemos modelar mientras nos preparamos para el segundo advenimiento de Jesús.

El crecimiento de la iglesia no consiste en técnicas o métodos, sino en vidas transformadas por el poder del evangelio. Colocamos este valioso material en manos de los miembros de iglesia con la certeza de que producirá el reavivamiento esperado.