El 28 de mayo es el día mundial de oración por los niños en riesgo, tiene más relevancia
de lo que a veces quisiéramos que tuviera. Limitarnos a orar por ellos
o llevarles un regalito esporádico, es bueno, pero no suficiente. Por tal
motivo, les animamos para aprovechar estos días especiales que la iglesia
mundial ha designado y ser agentes que contribuyan a la liberación de
aquellos niños y adolescentes que están cerca de nosotros, pero que se
encuentran atrapados y no tienen quién les ayude.
Les animamos a promover este día, y que las actividades que se
realicen, marquen el principio de una atención continua para esos niños
y adolescentes que nos necesitan.